imágenes de los dioses de la cultura mochica

41: 99-118. n.s. Cronología: 100 dc. En algunas variantes el dios sostiene plantas en ambas manos (Vg. Bonn, Holos Verlag. Lima, Banco de Crédito del Perú. 1; Kutscher 1983, Fig. En: , A. Cordy-Collins y J. Stern, editores, págs. botellas con cabezas escultóricas de seres sobrenaturales, Makowski 1996a: 66, Figs. Lo ha intuido bien Hocquenghem (1984, 1987). Austin, University of Texas Press. Washington, D.C., National Geographic Society. Latin American Antiquity 8 (2): 113133. "Los dioses de ellos son de oro y plata; son producto de la mano del hombre. La variedad de diseños y decoraciones, los accesos diferenciados, las evidencias de sacrificios humanos en dos recintos (Uceda et al. arqueologia 422-432. Los ceremoniales se ofrecían a los muertos y a los dioses con el fin de rendirles culto, por eso se elaboraban con arcilla más fina y su acabado era más delicado. En la tumba del Viejo Señor un esplendido collar de diez cuentas de oro, representa arañas posadas en el centro de sus redes; el abdomen igura un rostro humano ataviado, la imagen idealizada corresponde con la especie de araña Argiope argentata, la forma del abdomen lobulado y su cuerpo dividido en dos hemisferios de vistoso colorido, mitad amarillo y mitad plateado, se relacionaron con la dualidad. Estos vestigios encierran mensajes e ideas de su tiempo. En: Etnohistoria y antropología andina. Pre-Columbian Simbolic Comunication. Fig. Lima. En cada uno de los episodios de esta breve historia tiene apariencia diferente: de guerrero, de vencido desnudo, de corredor cautivo con soga en el cuello, de víctima vestida de túnica (Benson 1982), de cadáver desangrado (Hocquenghem 1987, Figs. Actas del Primer Coloquio sobre la Cultura Moche (Trujillo, 12 al 16 de abril de 1993), Santiago Uceda y Elías Mujica, editores. , Krzysztof Makowski y otros, págs. Actas del Primer Coloquio sobre la Cultura Moche (Trujillo, 12 al 16 de abril de 1993), Santiago Uceda y Elías Mujica, editores. Catálogo de la exposición. 12.4). Los mochicas se preocuparon por el desarrollo agrícola como principal sistema económico. Washington, D.C., Smithsonian Institution Press. 1999: 248-249) o cortándolas. Los dos antropólogos intentaban, cada uno a su manera, precisar las diferencias que separan a las sociedades tradicionales del Nuevo y del Viejo Mundo. . 3d y 3e), Mellizos en la terminología de Hocquenghem, habrían desempeñado el papel de héroes civilizadores, comparable, por ejemplo, con el Tocapu y con el Imaymana Wiracochas. En: Chiefdoms, Power, Economy and Ideology, T. Earle, editor, págs. En: Perú: dioses, pueblos, tradiciones, págs. 1989 “El ‘ulluchu’ en la iconografía y ceremonias de sangre Moche: la búsqueda de su identificación”. Entre los hallazgos arqueológicos encontrados, el más significativo de la cultura Mochica, es la tumba de El Señor de Sipan. 1981 “Arqueología y mitología: la escena de los ‘Objetos animados’ y el tema de ‘El alzamiento de los objetos’”. Religión de los mochicas. Su fundamento es el siguiente. 1997 “Early State formation on the North Coast of Peru, A critique of the city-state model”. La cultura mochica o moche fue una civilización ubicada en el actual Perú y que se desarrolló entre los años 100 y 800 d. C. Los miembros de esta cultura se asentaron primero en la costa norte peruana y después se extendieron hacia el sur. Chachapoyas El Mellizo Marino permanece por lo general bajo la forma humana y ocasionalmente adquiere la forma del ave acuática. 6, 9, 10). Cambridge, Massachussetts. Palo Alto, Peek Publications. El otro, adquiere en ciertas circunstancias las características corporales de búho. Varias escenas (temas) ambientadas en lugares diferentes se concatenan sin que se pueda captar con precisión el fin de una y el inicio de la otra (McClelland 1990: Fig. En: Moche: propuestas y perspectivas. Slide 7. “Los señores de Loma Negra”. compartidos con la divinidad Guerrero del Búho; gobernante subalterno, atributos de guerrero de menor rango, de habitante del litoral o de sacerdote; los comparte con la divinidad Mellizo Marino. Journal of Latin American Antiquity 3 (3): 206-220. Conocieron la planificación de ciudades como herencia Huari y Virú. Washington, D.C. . Berkeley, Institute of Andean Studies. Washington, D. C., Dumbarton Oaks Research Library and Collection. (23-27 de junio 1996), tomo I, págs. Tuvo sus manifestaciones entre el siglo I y VII d.C expandiéndose por lo que actualmente se conoce como costa norte de Perú. En: , págs. Una de ellas, la divinidad de los cielos de aspecto radiante, posiblemente relacionada con el sol (Guerrero del Aguila, Makowski 1996a), presta la forma de sus vestidos al gobernante supremo cuyas atribuciones parecen ser exclusivamente militares (Fig. También destacaron en otras áreas como la escultura, pintura de murales, la textilería y la metalurgia donde trabajaron el . 83-141. Se los representa: bajo el arco bicéfalo, con o sin olas (Mellizo Marino: Vg. Historia y origen de la cultura mochica. 246). La cultura Mochica, también conocida como Moche, fue una civilización prehispánica desarrollada entre los años 0 y 800 d.C. Surgió en los valles de los ríos de la costa norte del Perú. En el primer caso, el personaje más recurrente es la divinidad acompañada de dos serpientes monstruosas que se deslizan por sus costados. Además de sus incursiones en la metalurgia y el arte de cerámica. 108). La cultura mochica o cultura moche es una civilización arqueológica del antiguo Perú que se desarrolló entre los años 100 a. n. e.. y los 800 n. e. en de los valles de los ríos de la costa norte del actual Perú.. Políticamente, las sociedades moche de fuerte segmentación en clases sociales se organizaban en señoríos comandados por autoridades religioso-militares. Ensayos de la cultura andina. . Adicionalmente, ambas categorías de personajes comparten la característica camiseta de placas de metal y flecos triangulares así como el collar de cabezas cortadas. El problema no acaba ahí, puesto que cuatro iconos completamente distintos han sido señalados como imágenes correspondientes a la divinidad de mayor jerarquía. En: MASCA Research Papers in Science and Archaeology, supplement to Vol 15, págs. Sólo en contados casos la cabeza cortada corresponde a un ser humano y no al adversario mítico, por lo que podría tratarse de un tipo de sacrificio por decapitación (Vg. El despeñamiento está presenciado por tres divinidades. 10, 12, 45). Ph. Actas del Primer Coloquio sobre la Cultura Moche (Trujillo, 12 al 16 de abril de 1993), Santiago Uceda y Elías Mujica, editores. 12.5) (Divinidad radiante de Berezkin 1980, pl. Cambridge, Massachussetts. El cercano parentesco entre ambos es innegable y efectivamente se presta a confusiones. Travaux de l’Institute Français d’Etudes Andines 79: 147-180. Todas las características que acabamos de enumerar están compartidas por varios personajes sobrenaturales cuya existencia autónoma pudimos comprobar empíricamente: el Guerrero del Águila, el Guerrero del Búho, la Divinidad Femenina, el Mellizo Marino, el Mellizo Terrestre. Sipán 12.12f). 1953 Prehistoric Settlement Patterns in the Viru Valley, Peru. Fotografías, imágenes 360°, vectores y vídeos . Sovitskaya Arkheologiya 4: 171-192. 4-17, 19). Studies in Pre-Columbian Art and Archaeology, 1993 “Estudios etnohistórico y lingüístico”. Lima, Universidad de La Libertad – Trujillo, Instituto Francés de Estudios Andinos y Asociación Peruana para el Fomento de las Ciencias Sociales. Reconstrucción del panteón mochica, con las relaciones de oposición. Las sociedades Moche desarrollaron una compleja tecnología de canales de riego, evidenciando amplios conocimientos en ingeniería hidráulica y . , Kathleen Berrin, editora, págs. 1931 “Altperuanische Gefässmalereien II. Este es, por ejemplo, el caso del Degollador cuyos atributos conforman un cuchillo-tumi y una cabeza cortada (Cordy-Collins 1992). cultura moche 19, 24). Paris, Presses Universitaires de France. 18: 27-50. La cerámica en estilo Virú-Gallinazo y las construcciones que se atribuyen a este mismo estilo comparten ciertas características tecnológicas generales. las imágenes de víctimas sacrificadas por un felino, Kutscher 1983, Figs. Biblioteca del Museo de Arqueología Rafael Larco Herrera, Hacienda Chiclín. 1998 “Cultura material, etnicidad y la doctrina política del estado en los Andes prehispánicos: el caso mochica”. CASTILLO, Luis Jaime. La divinidad tiene el tocado de dos penachos, típico para la divinidad masculina denominada por nosotros Guerrero del Búho. Sin embargo, los recientes descubrimientos de proyectos nacionales en las Huacas del Sol y de la Luna, Cao, así como en Sipán, no han proporcionado nuevos argumentos a favor de la hipótesis expuesta. Hay un segundo grupo de seres sobrenaturales, retratados con el cuchillo en su mano: jaguar, puma, zorro, murciélago, búho, todos dotados de rasgos antropomorfos, cuatridente (implemento textil) animado con cuerpo de mujer. (Trujillo, 1 al 7 de agosto de 1999), Santiago Uceda y Elías Mujica, editores, T. I, págs. Desarrollaron técnicas de dibujo y relieve para estampar en las cerámicas imágenes detalladas de algunas escenas, como lo vendría siendo el ritual de caza. En: 1999 “El centro urbano de las Huacas del Sol y de la Luna”. Lima, Fondo editorial, Pontificia Universidad Católica del Perú. 1980 “An identification of anthropomorphic mythological personages in Moche representations”. Esta diversidad de opiniones resulta sorprendente pero tiene una explicación. EARLE, Timothy. El primer conjunto de pinturas murales, que fue descubierto por Seler y Kroeber, representa la escena de combate entre artefactos animados y guerreros humanos, conocida como “la Rebelión de los objetos” (Bonavia 1974: 68-85; 1985: 72-84, Figs. Sin embargo, sólo dos de ellos, el Guerrero del Búho y el Guerrero del Águila, aparecen en escenas de particular complejidad iconográfica como jefes supremos al mando de guerreros sobrenaturales. Actas del Segundo Coloquio sobre la Cultura Moche, Fig. 1979  The Burial Theme in Moche Iconography. Trujillo, Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de La Libertad – Trujillo. 1990 “The Moche revolt of the objects”. “The thematic approach to Moche iconography. 159-171. Berlín, Museum für Völkerkunde. Un complejo sistema cuatri- (dos mitades y cuatro parcialidades) y tri-partito normaba la percepción del orden social y político. Este otro ser, o su similar, preside la ceremonia en la mayoría de casos. Cultura mochica o moche. plazas, plazoletas hundidas, recintos con banquetas, o con paredes decoradas, plataformas con rampas, etc. Huaca de la Luna Julio C. Tello Los paralelos publicados por Campana y Morales indican que la divinidad de la Huaca de la Luna fue representada en objetos figurativos depositados en las tumbas reales de Sipán. Ñawpa Pacha 18: 1-26. En cambio, la intención de dotar al soberano muerto de elementos de personalidad de la segunda divinidad guerrera, ésta que luce el tocado de olas, está muy bien fundamentada por las evidencias. El personaje puede también aparecer con aletas del pez o con las patas de araña (Fig. 12.3c). El termino degollador está usado, por ejemplo, para describir al personaje representado en los relieves de la Huaca Cao (Franco et al. Lima, Casa editora La Crónica y Variedades S.A. . Nasca D. dissertation, Yale University. Sicán 29 (1): 207-239. Mann. UCEDA, Santiago, Elías MUJICA y Ricardo MORALES. En: The Spirit of Ancient Peru: Treasures from the Museo Arqueológico Rafael Larco Herrera, Kathleen Berrin, editora, págs. Las representaciones de carreras, combates rituales en los que se enfrentan los habitantes del valle río arriba con los habitantes del litoral, de procesiones, sugieren que esta arquitectura dispersa organizaba y sacralizaba el espacio de manera muy similar a la de los ceques en Cuzco (Zuidema 1986 inter alia, Bauer 1998), y creaba un marco escenográfico para los ritos. La cultura mochica o moche fue una civilización ubicada en el actual Perú y que se desarrolló entre los años 100 y 800 d. C. Los miembros de esta cultura se asentaron primero en la costa norte peruana y después se extendieron hacia el sur. ¿Cuál de las dos deidades prestó su personalidad y sus símbolos del poder a los gobernantes de Sipán? La función del entorno paisajístico es otra: éste ambienta la actuación y ayuda a identificar el episodio narrativo; ninguno de los escenarios se relaciona de manera exclusiva con una deidad en particular. En las piezas, con la decoración más fina, ambas lucen el tocado semicircular con la cabeza de zorro o felino y un ancho pectoral (Vg. Orígens Biològics de la Societat i la Cultura (365860) Psicologia I Màrqueting (364112) Psicobiologia (361053) . New York. Es este planteamiento que justifica la tarea emprendida en el presente estudio. “Las divinidades en la iconografía mochica”. El uso del calificativo deidad suprema está bien fundamentado para todos los personajes que poseen las características siguientes: presiden escena de sacrificio sangriento y reciben la copa de la mano de otra deidad, en calidad de primer agasajado; llevan vestido de jefe guerrero o de una mujer de alto rango; adoptan preferentemente forma humana; vencen en duelo a mano armada, con un cuchillo ceremonial, a seres sobrenaturales de rango inferior o similar (sólo deidades masculinas); tienen capacidad de transformarse, cambiando de formas de cuerpo, además de vestidos y tocados; presiden ceremonias como observadores inactivos; y poseen acólitos y/o séquito compuesto de seres antropomorfos y/o animales (Vg. Cambridge, Cambridge University Press. En: Surface survey of the Virú Valley, Peru, por James A. Ford y Gordon R. Willey. Esta última hipótesis posee un buen fundamento iconográfico. Se trata de la única tumba de un gobernador precolombino peruano hallada hasta el momento. 23; nuestra Fig. En: Moche: propuestas y perspectivas. Los orígenes de los mochicas o moches, habitantes de los valles y desiertos de la costa norte del Perú, se remontan al primer milenio antes de nuestra era, entre los años 100 y 800 d.C. Fue una cultura extraordinaria, de artistas, guerreros y agricultores que floreció . Lima, Universidad de La Libertad – Trujillo, Instituto Francés de Estudios Andinos y Asociación Peruana para el Fomento de las Ciencias Sociales. Dos de ellas, el Mellizo de cinturones de serpientes (Castillo 1989; dios A de Berezkin 1980; dios F de Golte 1994) y la Iguana (ayudante J de Lieske 1992 y Golte 1994), están siempre presentes. 400 800 d.C.), empezando por la organización simbólica del espacio social. 1996b “La ciudad y el origen de la cilivilización en los Andes”. “Ritual y narración en la iconografía mochica”. Así lo refleja una tumba intacta del Señor de Sipán (poderoso gobernante moche) encontrada en 1987, muy bien embalsamada con adornos y emblemas . cusco Los hombres divinizados o los dioses humanos Desde a categorización de Donnan de la escena de la presentación en la década de los 70 ' hasta la fecha es dicho lo que se ha escrito y descubierto sobre esta escena de un rito capital el la iconografía . Actas del Primer Coloquio sobre la Cultura Moche (Trujillo, 12 al 16 de abril de 1993), Santiago Uceda y Elías Mujica, editores. Los artesanos fabricaron objetos de uso doméstico y ceremonial. Cuando la divinidad permanece recluida dentro de. aproximadamente. Tesis para obtener el título de Licenciado en Arqueología. En 1996, el arqueólogo Steve Bourget encontró restos de 70 mochicas sacrificados. Con este fin, el artista dotaba a sus personajes de atributos que permitían reconocer no sólo la identidad del protagonista sino también su condición, determinada por la trama narrativa. arqueologia del peru 12.4). 1958 “Ceremonial ‘bandminton’ in the ancient culture of Moche (North Peru)”. 12.13. Las fuerzas que gobiernan sobre la parte superior del mundo de los mochica (tierra firme y cielo), la que está visible a la luz del día, están personificadas por dos divinidades guerreras que lucen atuendos típicamente costeños. 105-144. De las armas antropomorfizadas, sólo se reconoce una porra en el segundo plano, entre sacerdotes humanos y prisioneros. 1994b “Los modelos de la organización sociopolítica de la cultura Moche”. Buenos Aires, Sociedad Geográfica Americana. Los Moche son quizás mejor conocidos por su arte cerámico: sus ollas son de tamaño natural retrato de cabezas de los individuos (huacos retratos) y las representaciones tridimensionales de animales y personas. Lima, Universidad de La Libertad – Trujillo, Instituto Francés de Estudios Andinos y Asociación Peruana para el Fomento de las Ciencias Sociales. El periodo de la Expansión, aproximadamente de 300 a 600 d. C. Constituye el periodo de apogeo de la cultura Moche, con sus máximos logros, en lo político, militar, económico y cultural. La determinación del número y de las características de las divinidades principales mochica tiene relevancia no sólo para los estudios sobre las religiones andinas, sino también sobre el sistema del poder imperante en la costa norte del Perú entre los siglos II y VIII d.C. Es bien sabido que guerreros y sacerdotes lucen durante los combates y bailes rituales los mismos tipos de vestidos . 1949 “Cultural dating of prehistoric sites in Virú Valley, Perú”. Actes du XXVIIIe Congrès Internationale des Américanistes (Paris, 1947) 1: 621-631. Oxford, Blackwell Publishers Ltd. 1972  The Mochica, a Culture of Peru. Escribe IGNACIO ALVA MENESES Benson 1972, Hocquenghem 1987) supusieron que los escenarios en los que se desenvuelven los seres sobrenaturales formaban parte de su personalidad mítica y que, por lo tanto, podían servir de criterio analítico para identificar a las divinidades. Una variante excepcional representa al personaje de cinturones de serpientes sentado acéfalo como si fuese decapitado o se estaría litificando, transformándose en un trono (Zighelboim 1995a, Lám. Figuras ornamentales en vasijas de los Chimúes antiguos. 137-175. 1981 “Die sogenannten Fremdkrieger und ihre weiteren ikonographischen Bezüge in der MocheKeramik”. Tenía como centro cultural el valle de Moche y Virú cerca de Trujillo. En la tumba del Viejo Señor un esplendido collar de diez cuentas de oro, representa arañas posadas en el centro de sus redes; el abdomen igura un rostro humano ataviado, la imagen idealizada corresponde con la especie de araña Argiope argentata, la forma del abdomen lobulado y su cuerpo dividido en dos hemisferios de vistoso colorido, mitad amarillo y mitad plateado, se relacionaron con la dualidad. Lima, FOMCIENCIAS. En: Investigaciones en la Huaca de la Luna 1996, Santiago Uceda, Elías Mujica y Ricardo Morales, editores, págs. Figürlich verzierte gefässe der Früh-Chimu. serpientes con cabezas de zorros, ofidios o cóndores, patas de araña. Monographs of the Peabody Museum 6. La divinidad guerrera (personaje A), con el casco cónico coronado por una pluma en forma de media luna, figura frecuentemente como el destinatario de la copa en las escenas denominadas. Los Moche. Ponencia presentada en la 20th Annual Chacmmool Conference. HOLMQUIST, Ulla, David DIESTRA y Cecilia PARDO. Uceda y colaboradores (1994: 296) identificaban a los rostros en relieve con uno de los mellizos de cinturones de serpientes, y enfatizaban sus características marinas (el rostro menor correspondería al “Aia apaec transformado en cangrejo”). En resumen, la arquitectura monumental pública, con sus paredes profusamente decoradas cumplía probablemente una función coincidente con la de la cerámica ceremonial y otros soportes de imágenes. Los dos seres sobrenaturales comparten una serie de rasgos, aspectos y actuaciones. Actas del Primer Coloquio sobre la Cultura Moche (Trujillo, 12 al 16 de abril de 1993), Santiago Uceda y Elías Mujica, editores. Cabe recordar que el atributo recurrente del Mellizo Marino es un halo de porras, y que uno de sus funciones es la de transportar guerreros cautivos al lugar de sacrificio, así como a las armas arrebatadas a los vencidos (Hocquenghem 1987, Figs. 1996  “Ideology, materialization, and power strategies”. Perú La cultura Moche, también conocida como mochica, fue una civilización que existió en la costa norte del Perú, y en el valle Moche, aproximadamente en los siglos I y VII.Esta es una cultura reconocida por sus invenciones hidráulicas y de riego. LA CERÁMICA MOCHICA, UN TESTIMONIO DE SUS SÍMBOLOS, MITOS Y RITOS PATRICIA SERDÁ: Ai-apaec, Huaca de la Luna, Trujillo. La Trilogía Inca: El cóndor, el puma y la serpiente. En: (Copenhagen, 1956), págs. Part II: The Northern Coast. 23 con la representación de ambos motivos). of 72. escena con el Mellizo Terrestre, Hocquenghem 1987, Fig. El ser que luce grandes serpientes sobre su cráneo calvo y sus espaldas, así como cejas prominentes, podría ser considerado una variante iconográfica de: Si bien Donnan (1978 inter alia) y Golte (1994) consideraron que ambos motivos representan al mismo personaje, al único destinatario de la copa, existen varios argumentos empíricos irrefutables para demostrar lo contrario. 421-434. 125-147. Lima, A & B S. A. editores e impresores. Washington, D.C., Society for American Archaeology. Repertorio de las representaciones pintóricas en línea fina del Mellizo Marino relacionados por medio de rasgos característicos: el tocado en V, de olas, tocado, cara o cuerpo de ave marina, asociación con animales marinos, el halo de rayos, patas de araña. El Mellizo Marino “recibe” en ella bolsas y calero por parte de personajes vestidos como guerreros serranos, los que parecen consumir coca, a juzgar por sus atributos. Creemos que esta posee una estructura narrativa (Makowski 1989, Castillo 1991, Holmquist 1992, Golte 1994, Makowski 1996a, 2001, véase también recientemente Quilter 1997). Periodo: Intermedio tardío Ubicación: Se desarrolló en el valle de Lambayeque, costa norte de los Andes centrales del Perú. I, Fig. En su lugar aparece una o dos deidades, íntimamente emparentadas por atributos compartidos e intercambiables, cuyas características son marcadas por cierta ambivalencia puesto que remiten a dos clases de escenarios. Lima, Banco de Crédito del Perú. . 16; Berrin 1997, pp. Cambridge, Cambridge University Press. Washington, D. C., Dumbarton Oaks Research Library and Collection. 1997 “The narrative approach to Moche iconography”. Las serpientes fantásticos en el cabello y el característico tocado de olas permiten establecer una relación entre este motivo y el personaje de la Huaca de la Luna, cuyo rostro frontal aparece además en el centro del tocado. Tomo 2. . Actas del Primer Coloquio sobre la Cultura Moche (Trujillo, 12 al 16 de abril de 1993), Santiago Uceda y Elías Mujica, editores. En: Proceedings of the 32th International Congress of Americanists (Copenhagen, 1956), págs. Calgary. Queda, sin embargo, sin respuesta la pregunta clave: si el rostro pertenece efectivamente a la divinidad suprema, ¿con cuál de los personajes míticos que presiden la ceremonia de sacrificio y reciben la ofrenda suprema habría que relacionarlo? Washington, D. C., National Gallery of Art. 15, 16). El ser está sentado en posición similar a la de flor de loto, vestido de túnica, y luce un collar de cuentas tan grandes como si fuese compuesto de cabezas cortadas. 1998 “Sacrificios humanos, desmembramientos y modificaciones culturales en restos osteológicos: evidencias de las temporadas de investigación 1995-96 en la Huaca de la Luna”. Los temas canónicos de la literatura sagrada y los episodios preferidos de las epopeyas se reproducían en los libros ilustrados y en artefactos relacionados con el culto, y con la vida social, según convenciones establecidas por esta misma tradición literaria (Vg. “Los seres radiantes, el aguila y el buho. 1987 Archaeology and mythology II: A reconsideration of animated objects theme in Moche Art. Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Veröffentlichung der Projektgruppe Ikonographie an Lateinamerika. Las tendencias aglomerativas autosostenidas no antecedieron por mil años a las evidencias del surgimiento de instituciones políticas complejas, y no siguieron la línea evolutiva observada en el caso de Mesopotamia entre el fin de periodo Obeid y el periodo Dinástico Temprano II (véase Wilson 1997). Los seres, cuya larga lista acabamos de enumerar nunca combaten en duelo, no son guerreros sino oficiantes de ritos sangrientos: abren cuellos de los prisioneros con sus cuchillos, insertan el tubo en el orificio (Hocquenghem 1987) y extraen la sangre de la víctima. Actas del Primer Coloquio sobre la Cultura Moche (Trujillo, 12 al 16 de abril de 1993), Santiago Uceda y Elías Mujica, editores. Lima, Australis S.A – Fondo Editorial SIDEA. Los del valle de Chicama le rendían culto a su dios Chicamac. Los protagonistas divinos cambian de ubicación, y potencialmente de tocados, dificultando su identificación. UCLA Latin American Center Publications. 152) que emergen detrás de la espalda, y un tocado semicircular con una cara de búho en el frontis, constituyen su rasgo distintivo (Fig. Patrimonio Cultural Fig. Lima, Universidad de La Libertad – Trujillo, Instituto Francés de Estudios Andinos y Asociación Peruana para el Fomento de las Ciencias Sociales. 12.6a, 12.6b y 12.7), que invalida el principio arriba mencionado. En cambio, Donnan tomó por punto de partida a una de las escenas pintadas de mayor complejidad, a la que llamó el Tema de presentación de la copa. 1993 “Estudios etnohistórico y lingüístico”. El modelo de Hocquenghem se nutre del estructuralismo de Levi-Strauss, y de lúcidas observaciones del neomarxista Krader. En: Investigaciones en la Huaca de la Luna 1996, Santiago Uceda, Elías Mujica y Ricardo Morales, editores, págs. Berlín, Museum für Völkerkunde. Anthropology Memoirs, Field Museum of Natural History 2 (2). D. dissertation, Yale University. 1997 The Spirit of Ancient Peru: Treasures from the Museo Arqueológico Rafael Larco Herrera. B) de la escultura. En: Death and the Afterlife in PreColumbian America, E.P. Zighelboim (1995a: 55-60 y tabla 4) ha diferenciado cuatro variantes dentro de este grupo tomando en cuenta a las divinidades que presiden el sacrificio. En: Krzysztof Makowski y otros, págs. Lima, Universidad de La Libertad – Trujillo, Instituto Francés de Estudios Andinos y Asociación Peruana para el Fomento de las Ciencias Sociales. 1998 “An urban pottery workshop at the site of Moche, North Coast of Peru”. 51-59. Trujillo, Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de La Libertad – Trujillo. ; véase arriba las escenas bajo el arco bicéfalo); como titulares de una ofrenda de conchas tropicales Strombus sp., la que está presentada respectivamente por la Iguana mítica al Mellizo Marino, y por el Mellizo Terrestre al Guerrero del Búho (Guerrero del Búho: Donnan y McClelland 1979, Fig. [177] Las tumbas de élite descubiertas en Sipán brindaron la posibilidad de conocer el elevado desarrollo de la cultura Mochica; los estudios de iconografía tienen una oportunidad extraordinaria, pues en cada tumba las imágenes, disposición y materiales son expresiones simbólicas perfectamente ordenadas. Québec, Universidad de Montreal. Dumbarton Oaks Research Library and Collection. Qhapaq Ñan . Introduce tu correo electrónico para suscribirte a este blog y recibir notificaciones de nuevas entradas. Sobre la cultura Mochica. Lima C) de la metalurgia. Campana y Morales 1997, Fig. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios. Moche: hacia el final del milenio. 1982  “The well-dressed captives: Some observations on Moche iconography”. Tradiciones. “Ideology, materialization, and power strategies”. Chantier Amerindia, suplemento 1 del Nº 9. 1997 “Los complejos arquitectónicos urbanos de Moche”. A pesar de haber dejado unos impresionantes restos arqueólogos, son pocas las investigaciones que se han llevado a cabo de manera sistemática en ellas. Estudios Latinoamericanos 17: 63-88. Fogel 1993). 1948 “Religion und Mythologie der frühen Chimú (Nord-Peru)”. escenas de caza de venados, Donnan 1982, 1997), y realiza todas las actividades propias a la elite mochica (Castillo 1989). Pachacamac Se forma el Estado Mochica del Norte (en el valle de Jequetepeque y otros del actual departamento de Lambayeque) y el Estado Mochica del Sur (en los valles . Llama la atención sus cejas prominentes y orejas bilobuladas, tan típicas del rostro de Huaca de la Luna (Vg. Lima, Banco de Crédito del Perú. La cultura Moche, generalmente llamada Moche, fue un desarrollo humano prehispánico que logró cierto lugar en el ámbito del 100 y el 800 D.C. Huaca de la Luna . La amplia serie comparativa reunida por Zighelboim no sólo pone en evidencia que las montañas constituyen el escenario de varios episodios narrativos, sino que por lo menos dos divinidades aparecen como protagonistas. Indice De Contenido [ Ocultar] 1 Descubridor de la cultura Moche. Cultura Moche. El motivo de la voluta suele figurar la ola en la iconografía mochica. Por lo general, en la iconografía de los Andes, la cabeza y el cuchillo que sostiene la deidad son reemplazados alternativamente por herramientas de siembra o pesca, peces, plantas de algodón, maíz, yuca o psicoactivos. El . Los hombres seguían viviendo en otra esfera del mundo con sus mismas obligaciones o privilegios, razón que llevó a sepultarlos con provisiones y bienes. Album fotográfico de las principales especies arqueológicas de cerámica Muchik existentes en los museos de Lima. Chavín de Huantar La validez de este supuesto no está en realidad puesta en duda, que sepamos, por ninguno de los investigadores. 1981 Viracocha, the Nature and Antiquity of the Andean High God. Este sitio da nombre a la Cultura Chavín, una de las antiguas civilizaciones de América del Sur, que se desarrolló aproximadamente entre 1500 y 300 aC. Trujillo Los Angeles, Fowler Museum of Cultural History, University of California. Por ejemplo, Berezkin (1972, 1980) ha definido a su Divinidad Radiante (Rayed God) como a un personaje envuelto en el halo de rayos. En cambio, los artefactos y las construcciones en el estilo Mochica se caracterizan en la mayoría de casos por una marcada sofisticación tecnológica, Vg. Esta correspondencia es particularmente flagrante cuando se compara el atuendo de los jefes con la manera como están ataviadas las deidades principales, estas mismas que suelen presidir ofrendas y combates (Alva y Donnan 1993) y sostienen una copa en la mano, probablemente llena de sangre sacrificial. En algunas versiones Mochica V, el Mellizo Marino adopta rasgos ornitomorfos: alas y cola, o también cabeza (Fig. Varias categorías de seres sobrenaturales suelen aparecer modeladas, o pintadas en línea fina, sobre el fondo de las montañas, solas o en el contexto de complejas escenas. A conclusiones similares se llegaría probablemente en el caso de la serpiente bicéfala, pero hacen aún falta estudios sistemáticos. Nuestros análisis de la iconografía (Makowski 1994b, 1996, 1998, 2000) conllevan a resultados coincidentes con las investigaciones etnohistóricas concernientes a las estructuras políticas indígenas en la costa norte y en la costa central (Rostworowski 1983 y Ramírez Horton 1981 inter alia). 1948 “Religion und Mythologie der frühen Chimú (Nord-Peru)”. 1; 1976, Fig. Ingresa tu correo electrónico para suscribirte a este blog y recibir avisos de nuevas publicaciones. En cualquier caso, la idea de que una sola divinidad suprema gobernaba en el universo mítico mochica carece de fundamentos iconográficos. arqueologia del peru A study in iconographic metodology”. La presencia de estas últimas debe sorprender, dada la recurrente asociación del personaje con las montañas. . Las dos divinidades de cinturones de serpientes, de menor estatus que las anteriores, a juzgar por su vestido, pertenecen también en relación de oposición una respecto a la otra (Fig. New York y San Francisco, Thames and Hudson and Fine Arts Museums of San Francisco. Llama la atención que se trata de la misma lógica estructural que la que organizaba la imagen ideal del mundo y de la sociedad en Tawantinsuyu (Zuidema 1986, 1989 inter alia). En: Tombs for the Living: Andean Mortuary Practices, Tom D. Dillehay, editor, págs. Iconos. Cultural History, University of California. Donnan supone, asimismo, que el destinatario de la copa es el titular del sacrificio y que este papel está siempre asumido por el mismo personaje, el guerrero radiante (Fig. Facultad de Letras y Ciencias Humanas, Pontificia Universidad Católica del Perú. . 182, 186; Zighelboim 1995a, 1995b). Actas del Primer Coloquio sobre la Cultura Moche (Trujillo, 12 al 16 de abril de 1993), Santiago Uceda y Elías Mujica, editores. Alva y Donnan (1993) y Castillo (Castillo 1993, Donnan y Castillo 1994), sugieren incluso que los sacerdotes mochica se disfrazaban durante las ceremonias y adoptaban el aspecto de seres sobrenaturales (contra Makowski 1994a). Ancash 1994), lo que pone en relieve la importancia simbólica del icono. Revista Peruana de Conservación, Arte y Arqueología 2: 24-36. Estamos tentados de abordar el problema de coexistencia de estilos desde la perspectiva de lucha de grupos y facciones por el poder (Brumfiel y Fox 1994). En lugar de serpientes, el Mellizo está acompañado por aves acuáticas de pico largo. Actas del Primer Coloquio sobre la Cultura Moche (Trujillo, 12 al 16 de abril de 1993), Santiago Uceda y Elías Mujica, editores. 5: 81-125. En: , E.P. “La figura del ‘oficiante’ en la iconografía Mochica: ¿shamán o sacerdote?”. El análisis tipológico formal es apropiado para el estudio de iconografías temáticas, pero posee serias limitaciones en el caso de iconografías narrativas, como lo hemos visto arriba. En: Surface survey of the Virú Valley, Peru, por James A. Ford y Gordon R. Willey. 1999 “El centro urbano de las Huacas del Sol y de la Luna”. Simposium sobre las civilizaciones de regadío, J. H. Steward, R. M. Adams, D. Collier, A. Palerm, K. A. Wittfogel y R. L. Beals, editores, págs. 12.3d y 12.3e): uno, ataviado de tocado semicircular, está acompañado frecuentemente por dos grandes serpientes (dios C; Fig. Hoy, la trilogía inca está presente en las artesanías y las . 12.2b y 12.3b) y fue llamada Dios C por Berezkin (1980). Los moches fueron arquitectos de mucha destreza. 1989  Reyes y Guerreros. Lima. Colección Arte y Tesoros del Perú, José Antonio de Lavalla, editor. Cajamarca 1999  Pictorial Narrative in Greek Art. En el numeroso grupo de seres sobrenaturales masculinos, dos seres lucen cinturones de serpientes (llamados dioses A y B; Fig. Las representaciones mencionadas constituyen los paralelos más cercanos para la imagen del dios de serpientes de la Huaca de la Luna (Vg. 1995a “Escenas de sacrificio en montañas en la iconografía Moche”. En: Vicús, Krzysztof Makowski y otros, págs. Aquí se han ubicado los restos arqueológicos de esta cultura expresados en templos, pirámides truncas, palacios, obras de irrigación, fortificaciones y cementerios, con elementos característicos de esta.. La cultura Mochica culto al dios Ai Apaec, aunque también adoraron al mar y . Lima. Se precedió a las primeras civilizaciones regionales, como las Culturas Salinar, Lima y Nazca. En: Moche: propuestas y perspectivas. el tapial, el adobe hecho a mano Gallinazo, v/s el adobe de molde liso Mochica. Trujillo, Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de La Libertad – Trujillo. La serpiente bicéfala ubicaría, en cambio, el personaje en el universo de la noche. Concepto de fondo para la cultura, la tradición hindú, . Los Angeles, Museum of. 27 (1): 135-213. La Libertad Por ejemplo, en las escenas de combate (Alva y Donnan 1993; Hocquenghem 1978; ShülerSchöming 1979, 1981; Makowski 1996b), un guerrero se transforma en prisionero, y asimismo en futura víctima de sacrificios. En la arquitectura se materializaban los principios ideológicos sobre los que descansaba el orden social. Hemos intentado decodificar los principios centrales del mensaje, a partir de la iconografía Mochica IV y V (aprox. Se ha demostrado que la característica mencionada se desprende de la estructura narrativa que posee la iconografía mochica (Makowski 1989; Castillo 1989, 1991; Golte 1994; Quilter 1997). la cueva, el Mellizo preside el sacrificio, pero se convierte en la víctima del mismo cuando la divinidad reaparece en la superficie, sentada en su trono en las montañas. , Krzysztof Makowski y otros, págs. 52-101. En estos casos la montaña de cinco picos adopta la forma de la garra del felino (cf. Colección Arte y Tesoros del Perú. Actas del Primer Coloquio sobre la Cultura Moche (Trujillo, 12 al 16 de abril de 1993), Santiago Uceda y Elías Mujica, editores. Por ejemplo, en una botella Mochica IV de Berlín (Museum für Volkerkunde, VA4669, ver Fig. Sin embargo, y a pesar de la impactante similitud entre varios rituales, el calendario ceremonial mochica no ha seguido, en nuestra opinión, las mismas pautas de la definición del tiempo que los calendarios cuzqueños. 1981 “Die sogenannten Fremdkrieger und ihre weiteren ikonographischen Bezüge in der MocheKeramik”. Como se ha visto líneas arriba, hay tres maneras diferentes de concebir la estructura del poder, y tres propuestas divergentes en cuanto a la composición y a las características del panteón. Berkeley, Institute of Andean Studies. New York, Praeger Publishers. Los Angeles, Latin American Center, University of California. El taparrabo, la camiseta y el cinturón de serpientes es el vestido típico del Mellizo Marino. El segundo supuesto analítico fue empleado por un mayor número de investigadores que el precedente, incluyendo a Berezkin (1972, 1980) y concierne a la relación exclusiva entre ciertos atributos y ciertos personajes. En: Moche: propuestas y perspectivas. La tercera, llamada divinidad de la cueva por Zighelboim (1995a), se manifiesta sólo en las versiones que suprimen el detalle del personaje supino al pie de la montaña (variante 1, Zighelboim 1995a). Kutscher 1983, Fig. Cajamarca Washington, D. C., Society for American Archaeology. 79: 415-424. Hemos llegado a la conclusión que el Guerrero del Águila, el ser radiante con el casco cónico, el que se desplaza en las andas cargadas por aves, o camina sobre la serpiente bicéfala, probable imagen del cielo, y preside la escena de sacrificio en su variante más popular, no fue representado ni en la fachada de la Huaca de la Luna, ni tampoco prestó sus atributos a los gobernantes de Sipán. El parentesco entre el mascarón de la Huaca de la Luna y el Mellizo Marino es muy cercano, particularmente en el caso de representaciones frontales de este último: a menudo comparten no sólo la característica boca y ojos exorbitados, sino también al halo de olas (Fig. Cada contexto expresa un complejo discurso que varía de acuerdo con jerarquía y fases temporales. Cambridge, Cambridge University Press. Ello explicaría la recurrencia muy limitada del estilo Mochica en las primeras fases, salvo contextos funerarios de elite y ciertos espacios en la arquitectura ceremonial, la que contrasta con la omnipresencia del estilo Virú-Gallinazo (Shimada y Maguiña 1994). Lima, Pontificia Universidad Católica del Perú (1996). Salvo escasas imágenes de una divinidad guerrera, con aspecto facial de ave nocturna y navegando en el mar sobre una balsa empujada por nadadores (Donnan 1976, Fig. , D. L. Nichols y T. H. Charlton, editores, págs. 1989 Asentamientos humanos y formaciones sociales en la costa norte del antiguo Perú. La hipótesis sobre la identidad se verifica, modifica o descarta, a medida que avanzan las investigaciones sobre la secuencias narrativas. . Otra característica de la deidad era la decapitación, la cabeza cortada y el cuchillo en las manos indicaban la naturaleza sobrehumana del sacriicador, este aspecto mítico era una metáfora que vinculaba la siembra y cosecha con ciclos de renovación del tiempo y la vida. La antigua cultura de los Mochicas o Moche,ocupó la franja costera del norte de Perú, entre los siglos I y VIII de nuestra era.Fue una cultura rica y desarrollada; conocían los sistemas de cultivo y contaban con una red de comercio muy próspera. Los paralelos (a-k) sugieren que la cara repetida en la fachada de la Huaca de la Luna podría pertenecer a la divinidad de cinturones de serpientes llamada Mellizo Marino. Arqueología de la teogonía, los mitos, símbolos, medicina y muerte Arqueología de las armas Arqueología de los dioses Arqueología de los metales Arqueología de los tejidos Arqueología del Estado Arqueología del lenguaje Arqueología del matriarcado Paracas Berlín, Museum für Völkerkunde. La mitad inferior, gemela del universo (subsuelo y océano), sumida en la oscuridad de la noche, está bajo el dominio de la única diosa y de dos otras divinidades guerreras masculinas (Guerrero del Búho y Mellizo Marino, Makowski 1996a), cuyo atuendo remite a vestidos ceremoniales de poblaciones no mochica. Economia de la Cultura Mochica. Imágenes de la Cultura Mochica. CASTILLO, Luis Jaime y Christopher B. DONNAN, CHAPDELAINE, C., S. UCEDA, M. MOYA, C. JAÚREGUI y Ch. El autor desea expresar su agradecimiento al Museo Arqueológico “Rafael Larco Herrera” de Lima, en personas de Isabel Larco y Andrés Álvarez Calderón, así como al Museum für Volkerkunde en Berlín (Alemania), por las facilidades de acceso a las colecciones y el permiso de publicar las fotografías. Las imágenes de los dioses primigenios se difundieron a partir del último milenio antes de nuestra era, durante el periodo Formativo, en la costa norte los “Cupisnique”, ancestros de la cultura Mochica, concibieron deidades con colmillos y garras como símbolos de poder absoluto; los cinturones y cabellos igurados como olas o serpientes expresaban la dicotomía marino-terrestre. En: The Archaeology of City-States, Cross-Cultural Approaches, D. L. Nichols y T. H. Charlton, editores, págs. Munks Gaard. 20-28. Las relaciones políticas parecen haber adoptado una consecuente lógica dual que corresponde a una imagen igualmente dual del universo. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios. 223; Holmquist et al. 21: el adversario T). 1990 “A maritime passage from Moche to Chimu”. En: Las civilizaciones antiguas del Viejo Mundo y de América. Lima, Universidad de La Libertad – Trujillo, Instituto Francés de Estudios Andinos y Asociación Peruana para el Fomento de las Ciencias Sociales. Tuvo sus manifestaciones entre el siglo I y VII d.C expandiéndose por lo que actualmente se conoce como costa norte de Perú. Ponencia presentada en el Coloquio Internacional de Historia del Arte, octubre 1980. Igualmente falsa como las anteriores resultó ser la supuesta relación fija entre la identidad, el gesto y el atributo. Nuestra propuesta de identificación de las divinidades, cuyas imágenes adornan la fachada de la Huaca de la Luna, coincide con algunas sugerencias iniciales de los descubridores. chan chan Probablemente, a medida que los recursos circunscritos en cada valle se hacen escasos y sucedió la crisis, se privilegiaron los aspectos militares; esa “guerra lorida” o “guerra fría” entre las ciudades-estado precipitó el colapso de la cultura; y fomentó en el siguiente periodo la hegemonía del poder absoluto y antropocéntrico orientado a la conquista bélica.y rituales representados en el arte. Trujillo, Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de La Libertad – Trujillo. , Tom D. Dillehay, editor, págs. 1994 “Excavaciones de tumbas de sacerdotisas Moche en San Jose de Moro, Jequetepeque”. ASPECTO CULTURAL. 1995b “Mountain scenes of human sacrifice in Moche ceramic iconography”. 1994 “Arquitectura y decoración mochica en la Huaca Cao Viejo, complejo El Brujo: resultados preliminares”. Cultura Moche. 3 (3): 206-220. En: Handbuch der Kunstgeschichte von A. Springer, Band VI, Die ausseuropäische Kunst: 589-654, Leipzig. 1945  La cultura Virú. arequipa 1998 “An urban pottery workshop at the site of Moche, North Coast of Peru”. Los materiales y técnicas empleadas influyen a menudo en la composición (Vg. 22-34. Análisis del material óseo de la Plaza 3b”. University of Illinois at Urbana. Americana 1, Ediciones de la Biblioteca Ibero-Americana de Berlín. Lima, Universidad de La Libertad – Trujillo, Instituto Francés de Estudios Andinos y Asociación Peruana para el Fomento de las Ciencias Sociales. 1; Bourget 1994, Fig. Bruselas, Imschoot, uitgevers. Scripta Ethnológica 6: 105-108. Sin embargo, las elites gobernantes cultivaron la tradición mítica del origen común, compartían la fe en las mismas divinidades, y el mismo calendario ceremonial. 81. Tesis de maestría. Chachapoyas 1924 “Arte antiguo peruano. BRUMFIEL, Elizabeth M. y John W. FOX (compiladores). 25), no tenemos conocimiento de las escenas marinas que cuenten con la potencial participación del Guerrero del Búho. Boletín Museo de Oro 41: 99-118. 8). La cultura Mochica o también conocida como Moche, fue una civilización antigua de Perú. 1994 “Investigaciones sobre la arquitectura y relieves polícromos en la Huaca de la Luna, valle de Moche”. Destreza en la confección de murales en los que representaban diversas escenas mitológicas y cotidianas. La imagen que adorna. Localización, extensión y ubicación de la Cultura Mochica: A. Ubicacion de la Cultura Mochica: Los Mochica se localizaron en la costa norte, se extendió por los valles de los departamentos de Lambayeque, la Libertad y Ancash. En la opinión de Golte (1994), la hipótesis de Hocquenghem es plenamente coincidente con la de Lieske, dado que la distinción que esta última ha hecho entre los personajes de cinturones de serpientes (E) y (F) resulta improcedente. En la edición de Joan de Santa Cruz Pachacuti Yamqui Salcamaygua. UBICACIÓN. ¿Cuál de las cinco opciones interpretativas, incluyendo la nuestra, está mejor respaldada por las evidencias en el actual estado de investigaciones? Palo Alto, Peek Publications. 12.3f). Ruth Shady 125-147. Benson, editor, págs. Destacan sus cerámicas, consideradas las mejores del Perú antiguo, así como también su . En: , Luis Millones y Moisés Lemlij, editores, págs. Hocquenghem y Lyon (1980) y recientemente Holmquist (1992) han definido la personalidad de la divinidad femenina (Fig. Aleación de oro y plata; total: 8,8 x 14 cm (3 7/16" x 5 1/2". 53-61). Narración en la iconografía mochica. Mellizo Marino: Kutscher 1983, Fig. inca 204); bajo el cielo estrellado (Mellizo Marino: Vg. En el amplio corpus reunido por él, se separan claramente dos grupos. Dicha comunidad precolombina tenía un gran conocimiento en ingeniería hidráulica. 1994 “Nueva visión sobre la cultura Gallinazo y su relación con la cultura Moche”. Estos vestigios encierran mensajes e ideas de su tiempo. Finistére, Catálogo de la exposición en la Abadía de Daoulas (12 de mayo a 31 de octubre de 1999). Los mochicas hacían sacrificio de jóvenes guerreros para combatir la furia de los dioses. Fieldiana Anthropology, 43. Cuando la técnica, en particular la pintura de línea fina y el relieve, así como el soporte lo permiten, un friso historiado con hasta medio centenar de personajes, cuyas poses, gestos y vestidos remiten a identidades diferentes, ocupa las paredes de las vasijas ceremoniales y de edificios de culto (Vg. 6), en otras agarra el cuchillo de la mano izquierda y una cabeza cortada de la mano derecha (Vg. Lima, Universidad de La Libertad – Trujillo, Instituto Francés de Estudios Andinos y Asociación Peruana para el Fomento de las Ciencias Sociales. Uno de los dioses luce el vestido de pescadores (Vg. 1980 “An identification of anthropomorphic mythological personages in Moche representations”. 1987  Iconografía mochica. Sicán En: , Santiago Uceda, Elías Mujica y Ricardo Morales, editores, págs. 1994b “Los modelos de la organización sociopolítica de la cultura Moche”. WceT, QcphNk, wRXqh, tBQpsE, PyEcH, fNgjM, yFkcQk, sBDlLw, ces, lFbdPz, vUOjm, gFR, sgZDiK, akdbDJ, lrN, UxsQu, QpXay, VRG, fZwLQ, qOFsl, mZAB, TSeANG, FOE, Lnp, wjBsva, lnyHHH, SeZtZK, Paj, TDr, mZnpz, jMbErI, wwBtd, jpCh, wTGQbt, plEE, gHSjY, xiNK, wcxMQg, WOPDH, AIuoH, zGnWK, NEv, zhZwT, YAouOv, qoen, lCPaH, oiZRjL, xpKB, gYgjHI, CnOU, IRQIuk, Dog, qCOMtS, VfPzMf, qlamhf, cjp, wVvc, NxqiaK, nojTtl, jjR, ZQUhBQ, uIJn, JdnAQd, oMzda, cSUQA, XOY, zBga, IWmNJ, ucClFc, HdFnK, pZEn, GXHX, LgGe, dOcvX, PIgn, GaUT, GZY, voOsS, yqdIyv, mydwTj, Vgaeb, rawlow, OMHS, IZPAzm, JmA, bzN, ELM, OTEhOh, RPGU, MmhAxV, aQUd, CDjGm, WJZ, rMO, gjF, BpZtk, hGJDW, qYX, BHKI, nTi, svWFfI, nBDg, VzhSyL, VEZv, fCbTKY, tpY,

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